Recorridos por la vega de Héctor Luis Prieto, el más joven de los Hombres Habano, añadirán atractivos a la Ruta del tabaco, nueva oferta turística de esta provincia cubana, anunciaron hoy sus coordinadores.
La finca Quemado de Rubí, dedicada al cultivo de la aromática planta, formará parte del itinerario por zonas rurales de esta región, famosa por la excelencia de sus cosechas, confirmó a Prensa Latina el laureado cultivador.
Explicó que una de las opciones de esa modalidad de turismo agrario será el hospedaje en cabañas de madera, construidas a semejanza de la arquitectura vernácula local.
La idea -añadió- es que los visitantes puedan apreciar todas las fases de la producción tabacalera, incluida la confección de los apetecidos puros cubanos, además de pernoctar en medio de la campiña.
Distinguido en 2008 como Hombre Habano tras obtener elevados porcentajes de capas para el torcido de exportación, Prieto asegura que la fama no lo afecta, lo importante es mantener lo logrado, sentenció.
En el veguerío de San Juan y Martínez, el campesino de sólo 40 años de edad siembra la solanácea al sol y bajo finas mantas, con el fin de colectar tanto las tripas -relleno- como la cubierta de los codiciados tabacos, hechos a mano en la isla.
En plena preparación de tierras, fase anterior a la de plantación, observa las fases lunares y la dirección de viento para hacer vaticinios, sembrar las posturas y cortar las hojas justo en el momento adecuado, por lo general cuando el astro se encuentra en cuarto menguante, afirma.
La ruta del tabaco, que pudiera estar lista para el venidero año, incluirá visitas a los mejores cosecheros de Vueltabajo, como se conocía antiguamente esta zona y la posibilidad de alojarse en algunas de las vegas del occidental territorio, distante 140 kilómetros de La Habana.
Esa iniciativa abarcará, además, sesiones teóricas sobre las características de la planta y festividades músico-danzarias, vinculadas a la tradición agraria de la región, adelantaron directivos del sector.
Pinar del Río aporta el 70 por ciento de la producción nacional de la hoja y cantidades considerables de materia prima usadas en las tabaquerías.
La finca Quemado de Rubí, dedicada al cultivo de la aromática planta, formará parte del itinerario por zonas rurales de esta región, famosa por la excelencia de sus cosechas, confirmó a Prensa Latina el laureado cultivador.
Explicó que una de las opciones de esa modalidad de turismo agrario será el hospedaje en cabañas de madera, construidas a semejanza de la arquitectura vernácula local.
La idea -añadió- es que los visitantes puedan apreciar todas las fases de la producción tabacalera, incluida la confección de los apetecidos puros cubanos, además de pernoctar en medio de la campiña.
Distinguido en 2008 como Hombre Habano tras obtener elevados porcentajes de capas para el torcido de exportación, Prieto asegura que la fama no lo afecta, lo importante es mantener lo logrado, sentenció.
En el veguerío de San Juan y Martínez, el campesino de sólo 40 años de edad siembra la solanácea al sol y bajo finas mantas, con el fin de colectar tanto las tripas -relleno- como la cubierta de los codiciados tabacos, hechos a mano en la isla.
En plena preparación de tierras, fase anterior a la de plantación, observa las fases lunares y la dirección de viento para hacer vaticinios, sembrar las posturas y cortar las hojas justo en el momento adecuado, por lo general cuando el astro se encuentra en cuarto menguante, afirma.
La ruta del tabaco, que pudiera estar lista para el venidero año, incluirá visitas a los mejores cosecheros de Vueltabajo, como se conocía antiguamente esta zona y la posibilidad de alojarse en algunas de las vegas del occidental territorio, distante 140 kilómetros de La Habana.
Esa iniciativa abarcará, además, sesiones teóricas sobre las características de la planta y festividades músico-danzarias, vinculadas a la tradición agraria de la región, adelantaron directivos del sector.
Pinar del Río aporta el 70 por ciento de la producción nacional de la hoja y cantidades considerables de materia prima usadas en las tabaquerías.
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