Las licencias especiales autorizadas por el presidente Barack Obama, las cuales permiten viajar a Cuba a los ciudadanos de Estados Unidos, han tenido un efecto sólido en el incremento de viajeros estadounidenses hacia Cuba, con un crecimiento de 61.2% en el primer semestre del año.
La Oficina Nacional de Estadística e Información (ONEI) dio a conocer en un informe publicado por la Agencia Cubana de Noticias (ACN), que los viajeros procedentes desde Estados Unidos se convirtieron en el tercer grupo de mayor afluencia a Cuba, detrás de los canadienses y la comunidad cubana en el exterior.
El enorme crecimiento de la presencia de viajeros de Estados Unidos no es sorpresa, pues desde que se restablecieron las relaciones entre los dos países y tras Obama autorizar 12 clasificaciones para poder venir a Cuba, la presencia de estadounidenses en las calles es más que notable.
El turismo, por disposiciones del bloqueo o embargo comercial que Estados Unidos mantiene contra Cuba desde los años 60, está prohibido para los estadounidenses, pero Obama dispuso, además de las 12 categorías, que los viajes puedan hacerse en carácter individual y sin la necesidad de andar en grupos, lo cual ha flexibilizado los trámites.
A Cuba se puede viajar sin necesidad de permiso para visitar familiares, como acompañante familiar de un viajero que tiene familia en Cuba, con fines periodísticos, para investigaciones profesionales o educativas, reuniones o conferencias profesionales, actividades o intercambios educativos, actividades religiosas, deportes, “proporcionar diversos tipos de apoyo al pueblo cubano”, proyectos humanitarios, entre otras categorías.
Han sido miles los ciudadanos estadounidenses que han aprovechado la ventana de esas categorías para venir al país de visita y hacer “turismo disfrazado”.
El aumento se da a pesar de que los vuelos directos de las aerolíneas comerciales estadounidenses no han comenzado, pues se supone arranquen la semana próxima con la llegada a Santa Clara de un avión de Jet Blue procedente de Fort Lauderdale. A ese vuelo seguirán otros de aerolíneas como American Airlines.
Ese incremento ha permitido a Cuba, según la información publicada por los medios oficiales, tener un crecimiento de 11.7% en comparación con el primer semestre de 2015, lo que equivale a un total de 2,147,919 de visitantes en los primeros seis meses del año. Esa cifra significa un nuevo récord, pues llegaron al país 25,895 vacacionistas más que para la misma fecha en el 2015, la cual no tenía precedentes.
Canadá continuó como el principal mercado para Cuba, pero registró una leve reducción provocada, según el Ministerio de Turismo (Mintur), por la devaluación del dólar canadiense.
Otro país que registró crecimientos desmedidos en la primera parte del año fue Alemania, cuya presencia tuvo un crecimiento de 69.2%. El gobierno cubano atribuye el alza a la entrada a la isla de nuevos vuelos de las aerolíneas alemandas Air Berlín Cóndor y Eurowings.
La Oficina Nacional de Estadística e Información (ONEI) dio a conocer en un informe publicado por la Agencia Cubana de Noticias (ACN), que los viajeros procedentes desde Estados Unidos se convirtieron en el tercer grupo de mayor afluencia a Cuba, detrás de los canadienses y la comunidad cubana en el exterior.
El enorme crecimiento de la presencia de viajeros de Estados Unidos no es sorpresa, pues desde que se restablecieron las relaciones entre los dos países y tras Obama autorizar 12 clasificaciones para poder venir a Cuba, la presencia de estadounidenses en las calles es más que notable.
El turismo, por disposiciones del bloqueo o embargo comercial que Estados Unidos mantiene contra Cuba desde los años 60, está prohibido para los estadounidenses, pero Obama dispuso, además de las 12 categorías, que los viajes puedan hacerse en carácter individual y sin la necesidad de andar en grupos, lo cual ha flexibilizado los trámites.
A Cuba se puede viajar sin necesidad de permiso para visitar familiares, como acompañante familiar de un viajero que tiene familia en Cuba, con fines periodísticos, para investigaciones profesionales o educativas, reuniones o conferencias profesionales, actividades o intercambios educativos, actividades religiosas, deportes, “proporcionar diversos tipos de apoyo al pueblo cubano”, proyectos humanitarios, entre otras categorías.
Han sido miles los ciudadanos estadounidenses que han aprovechado la ventana de esas categorías para venir al país de visita y hacer “turismo disfrazado”.
El aumento se da a pesar de que los vuelos directos de las aerolíneas comerciales estadounidenses no han comenzado, pues se supone arranquen la semana próxima con la llegada a Santa Clara de un avión de Jet Blue procedente de Fort Lauderdale. A ese vuelo seguirán otros de aerolíneas como American Airlines.
Ese incremento ha permitido a Cuba, según la información publicada por los medios oficiales, tener un crecimiento de 11.7% en comparación con el primer semestre de 2015, lo que equivale a un total de 2,147,919 de visitantes en los primeros seis meses del año. Esa cifra significa un nuevo récord, pues llegaron al país 25,895 vacacionistas más que para la misma fecha en el 2015, la cual no tenía precedentes.
Canadá continuó como el principal mercado para Cuba, pero registró una leve reducción provocada, según el Ministerio de Turismo (Mintur), por la devaluación del dólar canadiense.
Otro país que registró crecimientos desmedidos en la primera parte del año fue Alemania, cuya presencia tuvo un crecimiento de 69.2%. El gobierno cubano atribuye el alza a la entrada a la isla de nuevos vuelos de las aerolíneas alemandas Air Berlín Cóndor y Eurowings.
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